La Casa Dolors Alesan: un viaje a través del tiempo y la arquitectura
En un mundo donde lo nuevo a menudo reemplaza a lo viejo sin reflexión, proyectos como la reciente renovación de la Casa Dolors Alesán, joya arquitectónica modernista de Barcelona, pone de manifiesto la importancia de la conservación arquitectónica como un acto de sostenibilidad cultural y ambiental, preservando un legado para las generaciones futuras en un espacio que continúa contando su historia mientras abraza el presente.
La Esencia de la Rehabilitación de la Casa Dolors Alesan. Recuperar para conservar
La Casa Dolors Alesan, situada en el emblemático Passeig de Sant Joan, es un testimonio viviente de la riqueza arquitectónica de Barcelona. Encargada en 1902 por Dolors Alesan al arquitecto Enric Fatjó i Torras, esta finca regia no sólo destaca por su rica decoración tanto exterior como interior, sino también por su significativo valor histórico y cultural siendo un componente fundamental del Patrimonio Arquitectónico de Barcelona.
La reciente intervención de Bach Arquitectes ha sido un delicado ejercicio de equilibrio entre preservar el carácter señorial del edificio y adaptarlo a las necesidades contemporáneas, transformándolo en un espacio habitable con 16 viviendas y 2 áticos dúplex añadidos, pasando de 4 a 18 pisos sin afectar el paisaje urbano ni la relación visual con el vecino Palau Macaya (rehabilitado también por Jaume Bach en 1989), manteniendo así un diálogo armonioso entre ambos edificios.
La incorporación de los dos áticos dúplex en la cubierta es un testimonio de cómo la innovación puede convivir con la tradición, ofreciendo nuevas perspectivas sin eclipsar la belleza original. Estos nuevos espacios presentan una solución arquitectónica contemporánea con su "cubo flotante" que se integra discretamente en el paisaje, visible solo desde ángulos específicos al ascender por el Passeig de Sant Joan.
La intervención de Bach Arquitectes ha sido un proceso meticuloso donde cada elemento, desde los suelos hidráulicos hasta las molduras de escayola de los techos artesonados, los cristales emplomados, las barandillas, etc. ha sido cuidadosamente catalogado, restaurado o reinterpretado. Este respeto por el pasado se ve reflejado en cada rincón de la Casa Dolors Alesan, donde la historia se palpa en la textura de sus paredes y en la luz que baña sus espacios renovados. La fachada, una mezcla de piedra y estuco, ostenta las iniciales "DA" en la puerta principal, un homenaje a su historia ligada a una familia de químicos y terratenientes, destacada en la exposición del 89.
Además, el proyecto enfrentó también el desafío de cumplir con la normativa actual en términos de seguridad y aislamiento y en la creación de accesos adaptados, sin comprometer la estética o la integridad estructural de la finca. La solución para salvar el desnivel de las escaleras sin necesidad de una rampa fue ingeniosa, permitiendo el acceso para sillas de ruedas a través de un local adyacente.
La Casa Dolors Alesan hoy
Estucos, escultura en piedra, metalistería y vidrieras forman una fachada de bellas proporciones y presencia en el Passeig de Sant Joan. En el interior de la Casa Dolores Alesan, destaca el hall de entrada y la escalera, con un gran lucernario en la cubierta que proporciona luz natural a todos los espacios. En el interior de las viviendas se conservan los suelos hidráulicos y la mayoría de techos con decoración en escayola, así como unas bellas tribunas en fachada y galerías en el interior de manzana.
La ampliación de la Casa Dolors Alesan con dos áticos dúplex de 190m2 cada uno es un ejemplo destacado de cómo la arquitectura contemporánea puede complementar y enriquecer el patrimonio existente. Estos nuevos espacios, diseñados con un lenguaje moderno y materiales que dialogan con la estructura original, ofrecen una visión de cómo la arquitectura puede evolucionar manteniendo sus raíces.
Los dúplex se integran en un nuevo volumen edificado con un cierto nivel de abstracción que se separa ligeramente de la finca original. La propuesta logra establecer un diálogo con el colindante Palau Macaya y la relación de los dos volúmenes arquitectónicos es visible únicamente en invierno, cuando la vegetación del Passeig de Sant Joan, de hoja caduca, permite ver esta parte de los edificios. El resto del año, la coronación del edificio queda oculta detrás de la vegetación, solamente visible desde las azoteas de las fincas vecinas.
Bach Arquitectes
Bach Arquitectes es un estudio de arquitectura que opera en un espectro amplio del diseño, desde la escala urbana a la doméstica y el diseño de interiores e industrial. A través de la innovación y la investigación, el estudio busca nuevas soluciones y alternativas en cada proyecto, logrando una alta calidad a través de optimizar tanto los recursos naturales como los económicos. Desde su fundación hace 25 años, el estudio ha diseñado proyectos en todas las escalas y múltiples programas y ha recibido numerosos premios y reconocimientos. El estudio está formado por un equipo multidisciplinar de profesionales en el ámbito del diseño urbano y arquitectura, diseño de interiores e instalaciones efímeras.
La reforma de la Casa Dolors Alesan por Bach Arquitectes es un testimonio del poder de la arquitectura para conectar el pasado con el futuro. Al preservar la esencia de la finca mientras se introduce una nueva vida dentro de sus muros, el proyecto sirve como un recordatorio inspirador de que el respeto por la historia y la adaptación a la modernidad pueden coexistir en armonía.