Entrevista a Jaime de Pablo-Romero (Estudio interiorismo Ynot)
Un piso en una casa señorial de principios de siglo del arquitecto Francisco García Nava, en un claro estilo neobarroco francés, con algunos bellos detalles modernistas, predispone bastante sobre lo que piensas que te vas a encontrar. En esta entrevista de Monapart Madrid a Jaime de Pablo-Romero lo confirmamos.
Recuerdo que la primera vez que visité a Jaime de Pablo-Romero en su estudio de interiorismo Ynot, en la calle Alfonso XII frente al Retiro, todas mis concepciones previas sobre cómo sería se quedaron derrumbadas en el umbral de su puerta.
La amplitud del salón de la entrada te sorprende nada más cruzar la sólida puerta de acceso, probablemente original por su conservada elegancia pese a su transformación, y a los mágicos árboles azules incorporados que acrecientan la altura del espacio. Tras esa rotura total del esquema de una vivienda burguesa de principios de siglo encuentras unos hermosos salones con miradores a los jardines del Retiro que se abren al principal de entrada creando una acogedora sala de exposiciones o de trabajo.
Y así es su diseñador. Su trabajo no te sorprendería si conoces el nombre de su estudio y has hablado un rato con él porque en ese “Why not?” se encierra la inteligencia de sus diseños que nunca descartan lo que su creatividad le sugiere y siempre arriesgan conociendo qué vale la pena. Y efectivamente lo vale.
Espero que mediante este coloquio que produce unos zoom de acercamiento y alejamiento hasta entrar en el centro de su Ynot, le conozcáis mejor.
Pregunta: ¿Arquitecto? ¿Interiorista? ¿Decorador de interiores?
Respuesta: Diseño de interiores es quizás la que más se aproxima a mi profesión, pero realmente es difícil, con un apellido, recoger todos los servicios que prestamos desde Ynot.
¿Por qué alguien decide que quiere ser interiorista?
Imagino que cada uno tendrá su razón. A mí en concreto, me motiva aportar valor añadido a las vidas de las personas. Mejorar su día a día.
¿Por qué decidiste montar tu estudio en esta vivienda tan cerca de El Retiro?
Porque el ser humano se mueve por la belleza y las emociones y creo que este espacio reunía factores para poder generar esas sensaciones que busco provocar en mis clientes.
¿Cuáles son los aspectos de una vivienda que más te interesan?
Todos tienen una importancia crucial e influencian a la hora de hacer un proyecto. Situación, superficie, arquitectura del edificio, acabados originales, luminosidad… Volvemos al tema de las sensaciones, cuando visito la vivienda de un cliente intento absorber la máxima información que la vivienda me aporta tal y como está para después, combinado con las necesidades, podamos desarrollar un proyecto único.
¿Tu proyecto debe ser un fiel reflejo de tu personalidad, de la de los propietarios o debe ser algo abierto?
Desde luego tiene que ser la casa de los propietarios, no la mía, por lo que es importante que seamos capaces de captar la personalidad de nuestros clientes para poder plasmarla en su casa.
¿Crees que las casas tienen un “alma”, algo que debe condicionar tu respuesta?
Por supuesto. Hay que saber escuchar lo que una vivienda tiene que decirte antes de empezar a proyectar. Ya en su día alguien dedicó su esfuerzo a proyectar esa vivienda, ahora no tendremos acceso a ellos pero la casa nos puede contar muchas cosas.
Arquitectura y decoración son conceptos distintos. ¿Qué les diferencia?
Todo, aunque para mí son complementos indispensables para una sensación óptima de bienestar. Con la arquitectura generas los espacios y volúmenes, incluso puedes hacer que una estancia sea más acogedora o menos. Con la decoración haces que sea habitable o inhabitable.
¿Cuál es el estilo arquitectónico que más te conmueve?
Siempre me ha fascinado el Brutalismo (Le Corbusier, Eero Saarinen y más recientemente Javier Sáenz de Oíza).
¿Por qué “porqué no”? ¿Por qué “Ynot”?
Porque es una pregunta-respuesta y, sobre todo, es una actitud, una forma de entender las cosas. Es la mejor definición de nuestro trabajo y de la manera de afrontar cualquier pregunta difícil. ¡No se puede o no se debe son frases horribles!
Háblanos del estilo de Ynot.
Yo siempre digo que es un estilo único y se traslada a los proyectos individuales haciéndolos únicos también. No creo en las modas como tal aunque siempre hay que estar actualizados, los materiales que nos aporta el desarrollo no estaban antes y eso hay que aprovecharlo.
¿Cuál es el elemento diferenciador del estilo Ynot?
La personalización, la creatividad, forzar todo lo que tenemos a mano para lograr un resultado diferente. Por supuesto, lo más importante es crear sensaciones, a ser posible que te dibujen una sonrisa en la cara.
La sociedad actual, ¿está formada para decidir cómo quiere vivir?
No, nunca lo ha estado y no creo que nunca lo esté. O quizás sí, pero desde luego, hay muchos inputs que no permiten llevarlo a cabo. Ese es un trabajo que habría que dejar a los grandes pensadores.
Creo, como dijo aquel, que “la mayoría de la gente no sabe lo que quiere hasta que se lo enseñas”.
¿Cómo valoras los medios sociales, las redes sociales -con su intrínseca fugacidad- en la formación de un criterio sobre la vivienda?
Yo no los uso como medio de inspiración aunque sí como tarjeta de presentación.
En general, las personas somos muy borregas y visitaremos aquello que mucha gente dice que está bien o nos fiaremos de aquel que tiene más seguidores, pero es un arma de doble filo puesto que con la intención de vender más o ganar seguidores enseñan lo que la gente quiere ver. Para mí, no se crea nada, son copias de copias, nada original.
La labor de Ynot –y de cualquier interiorista- ¿es un valor añadido al coste final de la vivienda?
Lo fácil sería decir que sí, pero esto dependerá del siguiente usuario de la vivienda. Puede que lo que tú has diseñado para una persona le parezca atroz a otra por lo que es un valor relativo. Dicho esto, evidentemente hay una serie de mejoras en cuanto a habitabilidad y usabilidad que se pueden considerar un valor añadido.
¿Tienes algún edificio de Madrid en el que te gustaría trasladar tu concepto de diseño?
¡Muchos!, pero más que por el edificio, por la forma de usarlo que hoy tienen los que lo habitan o trabajan en él. Estaría bien llegar al Banco de España y decir, “éste es el nuevo modelo de oficina en el que vais a trabajar”.
Tras nuestro último “Speakeasy #3 ¿Habitamos como pensamos?”, ¿cuál es tu opinión sobre el futuro de la vivienda?
La sostenibilidad es el futuro de todo, estamos en la era de la concienciación de que, o cuidamos lo que tenemos o colapsaremos. Esto se va trasladando poco a poco a la vivienda, pero no sólo en su construcción o en su eficiencia de consumo, sino en los propios materiales que se usan para realizar el interiorismo y la decoración.