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Viviendas inteligentes: el presente de los hogares

Está claro que Internet ha sido el mayor avance tecnológico en la historia en las últimas décadas. Y con el IoT (Internet of Things) sus aplicaciones a nuestra vida diaria se han multiplicado como nunca. Uno de esos avances son las viviendas inteligentes. En este sentido las Smart Home o los sistemas domóticos empiezan a sonarnos y serán uno de los protagonistas del mercado inmobiliario de 2020.

¿Qué es una vivienda inteligente?

Es una vivienda que dispone de una serie de sistemas que automatizan y permiten el control remoto de las diferentes instalaciones y aparatos presentes en un hogar convencional.

Desde fuera, este tipo de viviendas son aparentemente como cualquier otra, pero al entrar en ellas y poder controlar prácticamente todo desde el móvil, somos transportados a un futuro que ya es muy presente.

Ventajas de las casas inteligentes

Este tipo de viviendas posee muchas ventajas, pero entre ellas destacan:

Ahorro energético

Permite un uso más inteligente y eficaz de la energía. Se acabó el dejarnos la luz encendida o poner la calefacción en momentos que sólo suponen una pérdida. Además, los propios sistemas tienen memoria y se adaptan a las características del usuario y sus patrones de consumo y el exterior por lo que la eficiencia y el ahorro energético será cada vez mayor. Ahorrar en energía supone una reducción de la factura que no viene nada mal, teniendo en cuanta la tendencia constante al alza de los precios tanto de la electricidad como del gas.

Seguridad

En este sentido no hablamos sólo de poder controlar una alarma o un sistema de vigilancia de forma remota. La seguridad que nos proporcionan estos sistemas también está relacionada con la pronta respuesta ante una incursión, avería, incendio... y la recepción de avisos inmediatos en nuestro móvil.

Generalmente para tener una vivienda totalmente domotizada se requiere de una obra y de una inversión importante

Otras ventajas

  • Control de electrodomésticos.
  • Control remoto de toldos o persianas para poder adaptarlo a la luz natural.
  • Alerta de aparatos o electrodomésticos encendidos.
  • Sistema contra incendios, inundaciones y gas.
  • Alarma médica.

Inconvenientes de las viviendas inteligentes

De la misma forma que tiene sus ventajas, el mundo de las Smart Home también tiene una serie de desventajas.

Pese a que existen muchos sistemas inalámbricos, generalmente para tener una vivienda totalmente domotizada se requiere de una obra y de una inversión importante.

Toda la cantidad de funcionalidades desplegadas y conocimiento del usuario se dan, principalmente, por una captación constante de datos, hábitos de consumo, ubicación, búsquedas, intereses, aficiones… que coartan en gran medida la privacidad del usuario, aún estando dentro de tu propia casa. El Big Data tiene un perfil exacto de nuestros intereses, y eso es bueno para unas cosas, pero es un peaje a tener siempre en cuenta.

Muchas veces tenemos problemas de conectividad o de velocidad de conexión si muchos habitantes se conectan a la vez o si estamos lejos del router. Los sistemas domóticos requieren de grandes recursos de Internet y de una conectividad total en toda la casa.

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