Hay pisos con pros y contras. Unos con más pros, otros con más contras. Y luego hay viviendas a las que es prácticamente imposible encontrarles alguna pega, como es el caso de este gran piso. Lo tiene todo: céntrico, enorme, luminoso, acabados impecables… Y una reforma muy cuidada de esas que no se conforman con amoldarse al espacio, sino que lo reconfiguran para crear un hogar completamente nuevo y pensado para la vida del siglo XXI. En definitiva, un piso estupendo de arriba a abajo, de cabo a rabo, de pe a pa, de principio a fin.